Mas que un viaje es un fin de semana de tres días del día 15 al 17 febrero, viendo lugares muy cercanos, pero que merecen mucho la pena. El plan era quedarse en una casita de madera, situada en un pueblecito muy pequeño entre Monbuey y Manzanal de los Infantes, cercanos a Puebla de Sanabria.
Estas casitas de madera son altamente recomendadas por eso os dejo el enlace de su página web,
www.casasdesanabria.com/ . Además de ser muy románticas tienen unos precios asequibles.
La primera parada fue en la Plaza del Ayuntamiento de Sanabria, todo el conjunto de Puebla de Sanabria está muy restaurado, y su imagen es muy agradable para pasear por sus calles. Aquí dejo la foto de esta plaza.
Las vistas desde este punto de Sanabria son preciosas, se ve el Río Tera y la parte baja del pueblo. Como se puede ver en la siguiente fotografía, un valle muy grande rodea la población de Puebla de Sanabria.
Pero si hay algo que destaca en lo mas alto, es la fortaleza, totalmente restaurada. Este castillo perteneció al tercer conde de Benavente, el cual lo mando construir allá por el siglo XV, pero las sucesivas guerras con Portugal y Francia llevaron este castillo a la mas absoluta ruina. Ahora mismo esta cedido al ayuntamiento que lo tiene abierto, como reclamo turístico.
La parte más triste de Puebla de Sanabria, es el terrible suceso en el pueblo de Ribadelago, que fue literalmente arrasado por miles de metros cúbicos de agua, tras la ruptura de la presa de Vega de Tera en 1959, pongo esta historia porque es sobrecogedor ver las numerosas cruces que todavía hoy están en lo que quedo del pueblo arrasado, el nuevo pueblo llamado ahora Ribadelago Nuevo. En esta foto se puede ver el Lago Sanabria, el mas grande de España de origen glaciar.
Despues de comer en una pequeña playa fluvial a las orillas del Lago Sanabria, decidimos ir a ver nuestro alojamiento. Al llegar nos sorprendió gratamente que había varias casitas de madera dentro de un recinto cerrado pero en un pueblo muy pequeño, osea un lugar especial y muy romántico.
El primer día se había acabado, la ventaja que aportan este tipo de alojamiento es el no tener que salir a cenar a ningún restaurante, ya que la casa dispone de un servicio de cocina completo, donde poder preparar una cena.
Al día siguiente aprovechamos para visitar de camino a Zamora, la ciudad de Benavente, es pequeña pero muy acogedor su casco antiguo. Benavente tiene gran parte del centro como zona peatonal. En el centro se encuentra La Iglesia de Santa María de Azogue, que nos da entrada a las tres calles peatonales que están repletas de pequeños negocios.
Desde Benavente nos desplazamos hasta Zamora, es capital de Provincia pero es bastante pequeña, la zona antigua esta bastante bien conservada, pero nos llamo la atención la cantidad de bajos y casas inutilizadas. Recorriendo la calle central en pocos minutos se llega a una plaza donde esta situadas las ruinas del castillo, y desde donde hay unas espléndidas vistas del Río Duero y su tremendo puente romano.En la siguiente fotografía se puede ver la Iglesia de San Vicente, a escasos 200 metros se encuentra el Parador de Zamora, un lugar aconsejable para tomar un descanso y un buen café.
Estas son las vistas del puente romano sobre el Río Duero a su paso por Zamora.
Justo delante del Castillo se encuentra la catedral, de origen Románico, no es muy grande pero se ve claramente su planta de cruz latina.
Desde Zamora decidimos escaparnos a Toro, ciudad cercana a Zamora y muy conocida por sus vinos. En la plaza Mayor hay mucha vida y perfecta para ir de vinos y tapear. Al fondo de esa plaza se encuentra la Colegiata de Santa María la Mayor de siglo XII. También destacan los restos de las antiguas puertas de las murallas construidas para defender antiguamente la ciudad.
En la siguiente foto se puede ver la Plaza Mayor donde se encuentra el ayuntamiento.
Desde Toro nos desplazamos de nuevo a Sanabria a pasar otra vez la noche en la cabaña de madera.
Nuestro tercer día tenía como destino la ciudad de Bragança, ciudad en noreste de Portugal de unos 30000 habitantes. La siguiente fotografía es de la fortaleza de Bragança, situada en la parte mas alta de la ciudad, permite tener unas vistas de la ciudad impresionantes.
Para terminar nuestro viaje, decidimos entrar de nuevo en Galicia pero por Chaves, después de pasar por una carretera entre montañas, llegamos a Chaves una ciudad un poco más grande que Bragança, la visita de la zona antigua merece la pena, así como visitar la torre del homenaje. La siguiente fotografía muestra la Torre del Homenaje de Chaves.
Aquí terminaba nuestro viaje.
